Ante esta crisis sanitaria que estamos viviendo por el Covid-19, y para ayudar a frenar los contagios y aplanar la curva, es más necesario que nunca mantenernos a salvo: eso significa estar en casa y sólo salir para lo imprescindible.
Para ayudarte a pasar el confinamiento de forma más llevadera, te proponemos diez viajes para los amantes del vino y el enoturismo. Recuerda: #YoMeQuedoEnCasa
Si eres un fanático de las carreteras y sólo pensar en una carretera zigzagueante, un paso de montaña, un puente tendido sobre el océano o un vertiginoso camino sobre acantilados se te hace la boca agua… lee atentamente, ya que te presentamos trece carreteras de ensueño.
El desfiladero de Dadès (Marruecos)
Serpenteando a través del valle marroquí de Dadès entre las montañas Atlas y la cordillera del Anti-Atlas, la carretera de los desfiladeros de Dadès se sitúa 160 kilómetros al este de Ouarzazate, enmarcada en un paisaje salvaje dominado a un lado por la nieve y al otro por el desierto.
Furka Pass (Suiza)
El Puerto de Furka es un Puerto de montaña situado a 2.436 metros de altura en los Alpes Suizos que separan los cantones de Valaís y Uri. Sus espectaculares vistas y paisajes atraen a miles de personas cada año y se hizo muy popular tras aparecer en la película Goldfinger de James Bond.
La carretera del Atlántico (Noruega)
LA Atlanterhavsveien es una espectacular vía que desde la costa continental salta de isla en isla hasta llegar a Averøy, en un recorrido fantástico a través de puentes que se retuercen sobre el mar en escorzos imposibles. Se encuentra en la zona de los fiordos occidentales, y en determinadas épocas del año pueden llegar a avistarse focas e incluso ballenas.
Chapman’s Peak Drive (Sudáfrica)
El tramo de carretera lleno de curvas entre Hout Bay y Noordhoek cerca del Cabo de Buena Esperanza es uno de los monumentos turísticos más hermoso de África que cuenta con 114 curvas a lo largo de un acantilado de piedra arenisca con el estruendoso oceánico Atlántico a un lado y las empinadas montañas al otro.
Viaducto Millau (Francia)
Más alto incluso que la Torre Eiffel, el viaducto es el puente a mayor altitud en todo el mundo. Además de ser una obra maestra de la ingeniería parece una obra de arte con una longitud de 2.460 metros y se encuentra en la ruta París-Montpellier.
Trollstigen (Noruega)
Trollstigen, La escalera del troll, tiene once curvas de 180º une Åndalsnes con Valldal y forma parte de la carretera nacional 63. Su empinada inclinación alcanza el 9% y sus curvas dibujan en medio de la ladera de la montaña un paisaje que fascina a todos.
Transfăgărășan (Rumanía)
Esta carretera se extiende a lo largo de 90 kilómetros a través de las montañas del sur de los Cárpatos, entre el primer y el segundo pico más altos, Moldoveanu y Negoiu. Una ruta sinuosa de pronunciadas pendientes, curvas en ese y giros muy bruscos, la carretera va ascendiendo hasta alcanzar los 2034 metros de altitud en su punto más elevado. Como dato de interés cultural, pasa al lado de la fortaleza Poienari de Vlad el Empalador (más conocido con el nombre de Drácula), en la sección sur cerca del pueblecito de Arefu.
La Gran carretera Oceánica (Australia)
La Gran carretera Oceánica es una ruta espectacular que recorre 243 km a lo largo de la costa de Australia entre las ciudades victorianas de Torquay y Warnrnambool. La mayor parte del camino bordea el mar ofreciendo unas estupendas vistas panorámicas del estrecho de Bass y el océano sur.
Arthur’s Pass (Nueva Zelanda)
El Arthur’s Pass, un paso de montaña espectacular en los Alpes de Nueva Zelanda, te llevará de costa a costa en la Isla Sur, desde Christchurch en la costa este a Greymouth en la oeste. El Viaducto Otira, de 440 metros (en la foto cruzando el río Otira) ofrece las vistas más impresionantes de toda la ruta.
Seven Mile Bridge (Estados Unidos)
El Seven Mile Bridge es uno de los puentes más emblemáticos y espectaculares de Estados Unidos y tal vez de todo el mundo. Se adentra en el océano para conectar la península de Florida con los paradisíacos cayos: Key Largo, Islamorada, Marathon, Big Pine Key y, al final del camino, Key West.
Paso del Stelvio (Italia)
48 curvas, 24 km de longitud y un desnivel medio del 7,6% son algunos de los datos que demuestran que este, es uno de los puertos de montaña más duros del mundo. Situado a 2.757m de altitud, el paso del Stelvio se erige como el segundo paso más alto para cruzar los Alpes y su espectacylaridad viene marcada por la silueta que toma la carretera a lo largo de las 48 curvas que la conforman, la mayoría de ellas casi de 180 grados.
Túnel de Guoliang (China)
La localidad de Guoliang, situada en lo alto de las montañas de Taihang contaba con un único acceso: unas estrechas y peligrosas escaleras incrustadas en la ladera de la montaña. La historia cuenta que 13 habitantes de Guoliang construyeron el túnel en 5 años y ha sido bautizada como “la carretera que no permite error alguno”.
El camino de la Muerte (Bolivia)
El Camino de los Yungas, también conocido como el Camino de la Muerte, se extiendre por 80 km y une La Paz con la región de Los Yungas. Esta travesía es famosa por su peligro etremo y por el número de muertes en accidentes que registra cada año (una media de 209 accidentes y 96 muertes al año). El camino sólo posee un carril y que mide sólo tres metros en algunas zonas y si te descuidas puedes llegar a caer unos 800 metros en vertical. Además, la niebla y la lluvia son fáciles de encontrar y el barro inunda el recorrido en los peores casos.