] Photo by Mads Pihl – Visit Greenland
Aunque sea nombrada como la Tierra Verde, Groenlandia está cubierta en un 84% de su extensión, por una gruesa capa de hielo, a la que se conoce por Inlandsis, hielo de interior, que alcanza en el centro de la isla una altura de 3.200 m sobre el nivel del mar, siendo tal la presión que ejerce sobre el centro “rocoso” de la isla, que este se encuentra bajo la cota del nivel del mar. Esta masa de hielo supone el 10% de las reservas de agua dulce terrestres, y de derretirse, los océanos de la tierra se elevarían 6 ó 7 metros.
Groenlandia es una isla que se encuentra lejos de la realidad, donde las temperaturas durante el invierno en el norte alcanzan los -40ºC, y donde se rozan los 20ºC en las verdes regiones del sur durante los meses de junio a agosto. “Tanto en verano como en invierno el país ártico ofrece increíbles actividades, paisajes y experiencias para los viajeros que quieran experimentar un viaje totalmente distinto.” nos explican de Arctic Yeti.
El fenómeno del sol de medianoche, en el que el sol es visible las 24 horas del día, solo se puede llegar a experimentar más al norte del círculo polar ártico (66º 33′ 45 » N). Cuanto más cerca se esté del polo norte el número de días al año con luz continua es mayor. Así por ejemplo se puede disfrutar de ese fenómeno hasta 2 meses en Ilulissat y hasta 4 meses en Qaanaaq. En consecuencia en invierno esos lugares tienen 2 ó 4 meses de noches polares cuando no ven el sol. Al sur del círculo polar el sol se esconde detrás del horizonte solo durante unas horas en los meses de verano, observándose siempre un ligero resplandor tras las montañas al norte.
Ilulissat, fotografía por Mads Pihl y Visit Greenland
Groenlandia cuenta con una población de 57.500 habitantes, siendo Nuuk, en la costa oeste, la capital y mayor área urbana de la isla con una población de 15.469 habitantes. Administrativamente, Groenlandia se divide en cuatro municipios; Kujalleq, Qaasuitsup, Qeqqata y Sermersooq.
La mayor parte de la población de la isla es indígena (87%), de ascendencia diversa aunque básicamente inuit, mientras que el resto procede mayormente de Dinamarca. Hasta 1960, la mayoría de la población vivía en aldeas, pero desde entonces se ha ido desplazando hasta las ciudades, de manera que en la actualidad el 81% vive en ciudades, en los territorios no ocupados por hielo, concentrados sobre todo en la costa oeste entorno al área de la región de Disko, debido a que sus aguas están libres de hielo durante todo el año con el correspondiente beneficio para la pesca, y en el sur.
Ilulissat, fotografía por Paul Zizka y Visit Greenland
Los Inuit son un pueblo amable y tranquilo, son simpáticos, tímidos y risueños (compartir la risa con alguien es equivalente al contacto íntimo), con una moral basada en la generosidad y la comunidad, sin más leyes que las de la experiencia transmitida por la costumbre. El contacto con los occidentales, el comercio colonizador, la religión católica y una moral muy distante de la suya, han hecho que desde principios del siglo XX, hayan perdido buena parte de su identidad, ante un sedentarismo no resuelto y una excesiva dependencia de los subsidios estatales.
Los caracteriza un físico adaptado las duras condiciones climáticas; baja estatura, constitución robusta, miembros cortos para retener el calor, o los ojos rasgados y pestañas pesadas que protegen del resplandor del sol sobre el hielo.
Ilulissat, fotografía por Rebecca Gustafsson y Visit Greenland
El idioma es otra de las características que unen a los pueblos del ártico, ya que con ciertas diferencias entre los dialectos, resultan inteligibles unos para otros, salvo curiosamente entre los dialectos de la costa este y la oeste de Groenlandia (el más hablado de todos, con 40.000 personas, que fue escrito por primera vez en 1760).
Arctic Yeti | Pasión por la aventura y el frío
Arctic Yeti nace en 2011 como una agencia de viajes española dedicada en exclusiva a los destinos nórdicos. “Estamos especializados en países como Noruega, Islandia, Groenlandia y las Islas Feroe (Dinamarca). Después de varios años trabajando en estos increíbles destinos, los fundadores de la empresa unen sus fuerzas para ofrecer al viajero a través de sus experiencias, vivencias que jamás podrán olvidar.” nos comentan.
Narsarsuaq, fotografía por Mads Pihl y Visit Greenland
En sus propuestas de viajes, encontramos de aventura, en hotel y viajes autoguiados. “Cada viajero busca un producto deferente que se ajuste tanto a sus gustos como a su presupuesto. En Arctic Yeti nos comprometemos a buscar una opción acorde con los gustos de cada uno para conseguir acercar el Ártico a todos los viajeros.”
“Contamos con un equipo conformado por varios guías titulados expertos en el destino y con varios años de experiencia a la espalda, así como un preparado equipo de oficina para resolver todas tus dudas al instante. Tanto guías como el equipo de oficina se desplaza en verano a nuestros destinos, de tal forma que todos somos conscientes de las situaciones que el viajero puede vivir en cada país, conocemos el destino de primera mano y nos preocupamos porque cada viaje salga tal y como lo hemos planeado.” Este cuidado al cliente y conocimiento del territorio ha hecho que desde viajeros individuales, parejas y familias con niños hayan pasado por Arctic Yeti. Desde los que buscan una experiencia de aventura, hasta los que quieren vivir un viaje rodeados por la tranquilidad de los paisajes árticos.
Nuuk, fotografía por Rebecca Gustafsson y Visit Greenland
Descubrir Groenlandia
Cualquier persona que lo desee, puede viajar a Groenlandia con Arctic Yeti. Ofrecen desde viajes guiados en grupos reducidos con guías de habla castellana para hacer nuestra experiencia más auténtica, hasta viajes por libres o escapadas en las que gestionan vuelos, alojamiento, excursiones y transporte.
Desde Arctic Yeti nos recomiendan vestirnos con capas. Dado que las temperaturas son altamente oscilantes y podemos pasar del cálido sol a una intensa lluvia en cuestión de segundos, es preferible vestirnos de forma que podamos quitarnos o ponernos ropa a nuestra elección. “Para viajar a Groenlandia es importante llevar equipamiento adecuado, ropa y calzado impermeable y transpirable; disponer de varias capas si fuera necesario y llevar ropa de abrigo para cuando caen las temperaturas por la noche. Es importante llevar unas resistentes botas de trekking impermeables y tener en la mochila gorro, guantes, gafas de sol, crema de protección y ropa impermeable. En verano hay que llevar también protección contra los mosquitos tipo spray o mosquitera. Para los viajes en kayak o con trineo de perros se suele dar ropa apropiada para ese viaje junto con una lista de ropa recomendable para viajar.”
Qaqortoq, fotografía por Mads Pihl y Visit Greenland
La ruta más popular a Groenlandia de Arctic Yeti es Aventura en el Sur de Groenlandia. Consiste en un viaje guiado en grupo reducido durante 8 días por el sur del país, en el que tendremos unas vistas impresionantes a glaciares e icebergs y además, aprenderemos más sobre la cultura vikinga y sobre la cultura de los Inuits de ayer y de hoy.
También rutas a tu aire en Ilulissat, cerca del glaciar más grande del hemisferio norte y en Kangerlussuaq, donde iremos a la caza de las auroras boreales. Y finalmente nos proponen una ruta el el Sarfaq Ittuk, el barco que durante años ha sido y sigue siendo el único medio de transporte entre los pueblos de la costa oeste. Este increíble viaje parte desde Ilulissat, en la bahía de Disko, pasa por la capital, Nuuk, y llega hasta Qaqortoq, en el sur. Rutas inolvidables por un país de ensueño.
Sermeq, Kujalleq y Ilulissat, fotografía por Rebecca Gustafsson y Visit Greenland
Cada viaje tiene su encanto y sus peculiaridades. Dependiendo de lo que busquemos nos decantaremos por uno o por otro. Tal y como nos comentan desde Arctic Yeti: “Todos los viajes tienen algo especial que nos maravillarán. Dependiendo del área de Groenlandia que queramos visitar, podremos optar por una opción u otra. En mi caso, ya que me apasiona el senderismo y salir a la montaña para desconectar, me decantaría por nuestro viaje Aventura en el Sur de Groenlandia. Sin embargo, si tuviese que llevar a mis padres que son un poco mayores, les llevaría a Ilulissat dado que ofrece más comodidades y hotelería de calidad más alta.”
Por desgracia, Groenlandia no se libra del cambio climático. “Principalmente hemos notado el aumento de las temperaturas con el terrible retroceso de los glaciares.” nos explican. El Inlandsis ha cubierto la superficie de Groenlandia durante aproximadamente 3 millones de años, pero la actividad de los glaciares y el permanente derretimiento de la superficie, que ha aumentado mucho en las últimos años, han hecho que se haya reciclado numerosas veces. Los hielos que actualmente recubren la isla alcanzan una edad de 250.000, y el hecho de que retengan las partículas atmosféricas sirve para que los científicos puedan estudiar las condiciones en el planeta durante este tiempo.
Tasiusaq, fotografía por Mads Pihl y Visit Greenland
Bajo la influencia de la gravedad, esta enorme masa de hielo se desplaza hacia la costa, formando ríos de hielo que avanzan lentamente hacia el exterior por el empuje de la masa de hielo a sus espaldas, dando lugar a los mayores glaciares del hemisferio norte. El hielo, que debido a la enorme presión sufrida por la acumulación tiene un comportamiento plástico, se desliza sobre la superficie rocosa ayudado por el agua de deshielo que circula bajo ellos, y que funciona de lubricante. En este camino, la topografía rocosa hace que se produzcan distintas velocidades de avance por lo que la superficie del glaciar presenta espectaculares torres de hielo (seraqs) y profundas grietas, que a veces pasan inadvertidas por estar cubiertas de nieve, siendo extremadamente peligroso adentrarse en uno de ellos sin un guía experto.
Dependiendo de los factores climatológicos, los glaciares se consideran en avance, o retroceso, situación en la que se encuentran actualmente la mayoría de los glaciares. El turismo responsable es de las cosas más importantes para Arctic Yeti, y en todos sus viajes tratan de concienciarnos de “dejar el lugar igual o mejor de cómo lo hemos encontrado. No dejamos más que nuestra huella y nos llevamos de cada destino únicamente las fotografías que nuestras cámaras son capaces de tomar”.
Uunartoq, fotografía por Mads Pihl y Visit Greenland
Para los amantes de los animales, focas y caribús son los animales más fáciles de avistar en Groenlandia. Aunque también tendremos oportunidad de ver ballenas, bueyes almizcleros, lobos y zorros árticos. Ver Osos Polares es casi imposible, a no ser que nos desplacemos hasta el norte de Groenlandia. Además los Osos Polares, aunque son criaturas espectaculares, son extremadamente peligrosos y para aquellos que quieren verlos, Arctic Yeti ofrece viajes a Svalbard para avistarlos mediante una fantástica travesía en barco por el archipiélago.
Viajar a Groenlandia es uno de los viajes más impresionantes que podemos hacer en nuestra vida. Y para disfrutarlo al cien por cien, desde Arctic Yeti nos recomiendan “olvidarnos de todo lo que hayamos conocido hasta ahora. No hay carreteras que conecten dos ciudades por las que conducir, las ballenas se sumergen en los profundos fiordos plagados de icebergs y las enormes distancias se recorren en pequeños barcos preparados para abrirse paso por estos paisajes de ensueño. A diferencia de otros países, no siempre es posible encontrar todo lo que queremos en cualquier ciudad. Un claro ejemplo es que no siempre tendremos pan. El pan llegará, cuando venga el barco que lo trae, hasta entonces tendremos que esperar.”